Autor: Melina Balajovsky
Título: “Melany, historia de una anoréxica”
Datos de la obra/producto reseñado: Dorothy Joan Harris, autora. 2003, año de publicación. Grupo editorial norma
Género: Novela
Recomendado/a para: Adolescentes y adultos
El libro de la escritora canadiense Dorothy Joan Harris, “Melany, historia de una anoréxica”, publicado en el año 2003, nos lleva a un entorno familiar cotidiano normal. Melany, el personaje principal, es una alumna ejemplar en el colegio de solo 14 años, tiene una hermana mayor, con quien tiene las típicas peleas que surgen entre hermanas, una madre a la que le gusta que su familia se vea bien, y un padre con trabajo estable. Pero como la palabra “anoréxica” indica en el título, no hay algo muy normal, o al menos que esté bien en ese entorno.
La madre de Melany es una adicta a las dietas y las calorías que consume, no teme transmitir esa adicción a sus hijas, pues para ella su rutina alimentaria es un ejemplo a seguir. Melany, a partir de un comentario que su padre le realiza sobre su cuerpo, le comenta a su madre que quiere hacer las dietas que ella realiza. Su madre no ve nada raro, pero la compulsión y obsesión de una pequeña de 14 años por querer llegar a ser igual a las modelos con medidas 90-60-90 de las revistas la terminará enfermando.
Las palabras y la forma sencilla y simple de la autora al escribir hacen que uno quiera devorarse el libro y no saltearse una página. Tanto niños como adultos podrán leerlo y sentirse identificados con Melany, una joven que por seguir estereotipos poco reales de belleza, cae en una enfermedad, la cual todo el tiempo niega. Lo triste es que lo podemos ver en la realidad, la presión de nunca envejecer, mantenerse intactos al pasar de los años, ser delgados y bellos, esa búsqueda de la perfección que lleva no solo a la anorexia, también la bulimia, enfermedad que también hace su aparición en el libro.
Son precisamente, esos elementos, reflejados en la realidad, los que hacen de este libro una historia que crea conciencia y hace reflexionar, sin entrar en detalles muy técnicos y científicos sobre la anorexia. No solo es fácil de comprender para los adolescentes, si no también pone en alerta a los adultos a su alrededor. Se logra mostrar a la perfección el cambio que Melany va sufriendo en su cuerpo y mente. Expresa en todo momento lo que siente y piensa, con un final tan simple y conmovedor, que provoca al lector simplemente ganas de abrazarla, y que alguna que otra lágrima caiga.
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